domingo, 29 de mayo de 2011

En la montaña

Busqué el lugar que domina el valle pero que nadie ve

Con barro y madera la edifiqué

Le puse árboles de coraza

Y así vi parida mi casa

Con cantos y flores

Seduje a un billón de abejas

A todos atacan menos a su ama

En ese entonces tenía ambiciones

Deseos e ilusiones

Vivía la vida que soñaba

Es seguro en la montaña

de eso no hay duda

Aquí nadie me puede mirar

Aquí nadie me puede juzgar

Tan segura como dura

Disfruté mi bucólico vivir

Pero ya se lo que es la soledad

Y me paso el día esperando que el sol caiga

Y me paso la noche buscando el amanecer

En la montaña nadie me obliga a nada

Porque aquí nadie me manda

Porque nada tengo que hacer

solo marcar los días en el calendario

Hace tiempo que ha dejado de llover

Ni una gota a la vista

menos un temporal

La tierra se ha comenzado a trizar

las raíces cultivadas

se secan

se desprenden

un tanto secas

pero vivas

me hablan de parajes fértiles

y en su árida agonía

se trepan a mi oído

murmurando

“Si en la montaña te quieres quedar,

en la montaña pronto morirás”.

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